Muchas
veces he leído que hay que defender la diversidad biológica. Pues de esta
diversidad dependen muchas cosas. Por ejemplo: La descomposición de la materia
orgánica. O el control de las plagas .. O la polinización de las plantas. Todas
las especies son necesarias. Y cuando algunas desaparecen, disminuye la calidad
de los servicios que nos prestan los ecosistemas. Los tres mencionados u
otros!. Todos hemos oído decir que ahora se deben utilizar más insecticidas que
antes. Y también hemos oído decir que las abejas transportan el polen, y que
habría que evitar su extinción. (....).
Muchas
veces he leído que hay que defender la diversidad biológica, pero pocas he oído
decir que hay que defender la del intestino. Hablando de esto las respuestas de
la microbióloga Giulia Enders (Vanguardia, 22-05-15) son muy interesantes. Dice
que hay que cuidar las bacterias que viven dentro de este órgano. Incluso dice
que protegiendo estos microorganismos, nos protegemos de la obesidad, de las
alergias y de la depresión .. Y de más trastornos!.. (…).
De la
diversidad se habla mucho. No son pocos los pedagogos que defienden la
diversidad dentro de las aulas. No son pocos los entendidos que relacionan la
salud democrática con la diversidad.
Somos muchos los que consideramos que, en parte, en Cataluña se ha eliminado. Hablo de la Cataluña de “Junts
pel Sí”. Hablo de la Cataluña de la ANC y del Sr Mas.
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